EL FIN DE UNA ERA O LA CONFIRMACIÓN DE UN REINADO

"Es un clásico que pasará a la historia. Lo dos serán los jugadores mas grandes de todos los tiempos". En esos términos, con algún tinte de admiración y también con un dejo de resignación por no haber podido hacer demasiado en su compromiso de semi finales frente Federer, se refería (pot partido con Roger) Safín a la final que jugarán mañana domingo, por tercer año consecutivo, el suizo y Nadal para definir el campeón de Wimbledon 2008. Hasta ahora, las dos primeras fueron para Federer, pero por lo demostrado en este torneo por el español, la cosa pinta bastante diferente.

En el 2006, se puede decir que el mallorquín llegó casi sin proponerselo. Hasta ese momento, el único pasto que Rafa conocía era el del patio de su casa, y si no hubiese sido por un cuadro accesible, y un poco de suerte en algunos partidos y su inclaudicable espiritu de lucha (en tercera ronda se repuso de ir 2 sets abajo contra el ignoto Robert Kendrick), llegar hasta la instancia decisiva le hubiese resultado casi una utopía.

El 2007 ya fue diferente. En su camino debió sobreponerse a nombres de mas peso, y si bien sufrió bastante en un par de rondas (sendos 5 sets frente a Soderling y Youznhy), llegó a la final con contundencia. Su evolución en el verde cesped ya era notoria con respecto al año anterior, y esa adaptación se vió plasmada en la cancha en el partido final . El pleito se definió en 5 sets, y si bien Federer fue el justo ganador, no le fue para nada sencillo superar a Rafael.

Y si la del año pasado fue una versión evolucionada, el modelo 2008 es aún mejor. Está versión "pastera" de Nadal encuentra hoy un juego mucho mas pulido con respescto a los años anteriores, en los que a su habitual juego de fondo de cancha, le fue agregando algunos detalles necesarios para poder ser altamente competitivo en el verde cesped. Hoy su saque hace mucho mas daño, y si bien nunca va a ganar un partido gracias a el, el porcentaje de primeros servicios subió notablemente, y por ende, también subió la cantidad de puntos ganados con el mismo. Además, se puede verlo mas congeniado con la red, y aunque lejos esté de convertirse en un jugador de saque y volea (especie casi en extinción dentro del circuito), se nota la mayor asiduidad con la que utiliza este recurso tan efectivo en este tipo de terreno.

En fin, se podría decir que después de algunas idas y venidas, y algún que otro rechazo reciproco (?), el Rafa se hizo amigo del pasto y para confirmar esa amistad, celebró hace un par de semanas en Queens su primer torneo. Mañana, en la catedral del tenis, intentará sellarla eternamente ganando su primer "mundial de tenis" en el mítico cesped del no menos mítico, All England Lawn Tennis and Croquet Club .

En cuanto a las posibilidades de cada uno, creo que es la final con pronóstico mas incierto de todas las que jugaron hasta acá en cualquier superficie. Mas allá de la paridad tradicional en el juego de ambos (por algo son los dos mejores desde hace rato), generalmente siempre se vislumbra cierto favoritismo a favor de alguno, previo a cada partido que disputen. Ya sea por la superficie de turno en donde se juegue o por los momentos que vengan atravesando, la balanaza siempre se inclina de antemano para alguno de los dos lados, mas allá de que después, no siempre se cumpla con la lógica previa. En este caso, dichas previsiones quedan echadas por tierra. Si nos guiamos por pergaminos, Federer es claro favorito. 65 partidos invicto en cesped (40 consecutivos en Wimbledon) y 5 Wimbledon seguidos, avalan este favoritismo. No hay en la actualidad ningún jugador que juegue mejor que el suizo en esta superficie, en la que no pierde desde el 2002. Sin embargo, la notable evolución de Nadal sobre este tipo de terrenos que incluyen dos finales previas en este certamen, mas la obtención del otro torneo londinense hace un par de semanas (con triunfos grosos contra Karlovic, Roddick y Djokovic), mas su influyente fortaleza mental (superior a la de Roger) que viene acompañada del envión anímico de la última paliza que le pegó al suizo en Roland Garros y que le permitió aumentar su paternidad, equilibran la balanza.

Yo creo que gana Rogelio, aunque el "creo" de comienzo de oración debería cambiarlo por un "quiero". Siendo objetivo, esta vez mas que nunca hay un 50 % de posibilidades para cada lado

Elegí la foto del domingo a la tarde (?).