la copa la copa día 3

Okei. Llegar 1-2 al domingo era una posibilidad. Una posibilidad cierta. Nadie, creo, lo hubiera firmado el jueves a la noche, pero tanto Safin v. Nalbandian como el dobles eran partidos con resultado abierto.

Ahora hay que ganar dos de dos.

Tempranito a la mañana será Nalbandian -seguro- contra Davydenko -o Tursunov.
En cualquier caso, va a ser un partido que va a depender, por completo, del unquillense. Ninguno de los dos rivales puede ganarle y si él juega como jugó el viernes contra Marat Safin. Pero si saca y devuelve como ayer, hasta Sasa Tuksar le gana en tres.
El androide está en low-bat. Se notó contra Chela que el maratónico año (32 torneos, 3 series de Davis, ¡96 partidos!, un casamiento) lo perjudica después de la segunda hora de partido. Y no veo factible que Nalbandian lo pierda en tres. Yo casi que si a la cancha sale el ucraniano le pongo el gancho que todo se define en el quinto punto.
Con el colorado Tursunov es otra cosa.
El tipo ese es un limado de la Davis, que ganó todos los singles que jugó (incluidos Roddick y Gasquet, en cinco) . Y que le pega a la pelota con un caño. Es uno de esos jugadores que, como en el dobles, te agarran bien parados y no te dejan jugar. De todas formas las de ganar las lleva el unquillense.

Y después Acasuso -casi seguro- contra Safin -¿o Tursu?-. Que el gran capitán se pierda el quinto punto de la serie parece casi imposible, pero...
Contra Safin, Acasuso juega cómodo. Más allá de las circunstancias particulares de un partido que pasóhace cuatro años, la realidad indica que en los tres encuentros que disputó contra el ruso el misionero jugó bien y obtuvo buenos resultados. Incluso en la derrota en Madrid de este año Acasuso jugó muy bien.
Además, el Chucho es un jugador muy copero. De sus mejores 5 o 6 partidos que yo recuerde están incluidos los dos que jugó en la Davis (victorias ante Johanson y Hewitt) y aquel en Dusseldorf. Okei, todos sobre clay, pero de todas formas es un cuadro acabado de un jugador que se motiva, y mucho, jugando por la camiseta, y eso en un quinto punto de una final de la Davis puede pesar mucho.
En el improbable caso de que juegue el colorado va a ser, por un lado, un partidazo tremendo, seguro; y con pronóstico aún más reservado que el contra Safin.

Los rusos están match point, es cierto, pero a nadie puede sorprender si el equipo argentino mañana levanta la ensaladera. En ese caso tendremos que soportar un suplemento especial en Clarin con entrevistas a Vilas y a Clerc, a los "cuatro héroes" -nadie va a putear a Chela-, a Cañas, a Mancini y al cocinero chino del hotel ruso. Esperemos que así sea.