La Raqueta: Como te sentis en tu rol de entrevistador en Segundo Saque?.
Martín Vassallo Argüello: Es una postura distinta, me divierte mucho que los chicos cuenten las cosas que yo ya sé pero que la sepa la gente. Hay muchas cosas que nosotros hacemos y la gente no ve por que sólo nos ven en la cancha a la hora del partido, es lindo también preguntarle a los colegas sabiendo las respuestas.
LR: Que diferencias encontrás con Tenis Pro?.
MVA: Son dos programas totalmente distintos, creo que es al reves, hay que buscar alguna similitud. Nosotros mostramos las cosas que pasan afuera del partido, ellos se dedican más a una parte de diversión fuera de las canchas, nosotros vamos un poquito más a los entrenamientos y a la parte técnica, son dos enfoques totalmente distintos que la verdad que a la gente le gusta mucho conocer.
LR: Hace un tiempo te dirigia De la Peña, un coach que no te podía seguir, como se maneja eso?.
MVA: Lo ideal es tener alguien que te acompañe, aunque no sea el coach mismo, una persona que lo conozca. De última se puede trabajar en equipo, te puede acompañar un preparador físico, pero alguien siempre que entienda la línea del entrenador.
LR: Este año lograste tu primer triunfo en la catedral, contame sobre eso.
MVA: Ganar mi primer partido en Wimbledon fue una alegría enorme, fue algo totalmente inesperado. Yo fui con muchas ganas, con mucha alegría, con mucha felicidad, viviendolo como un premio a lo que había hecho durante el año y a tratar de disfrutarlo. Esa alegría se transformó en energía, en ganas, en fuerza y jugué un tenis fantástico, me sentí muy bien. Tuve un partido difícil por que él (Ivo Minar) venía jugando en hierba desde hacía varios días pero tuve suerte de haber jugado muy bien lo que hacía falta, que era saque, devolución, subir a la red, así que fue una alegría enorme.
LR: Qué te gusta y qué no del circuito tenístico?.
MVA: De la vida del tenista me gusta todo, tiene sacrificios, pero no son cosas que no me gusten, Son cosas que uno elige y estan en contraposición con lo que hace el resto de la gente. Tenemos una manera distinta de vivir, lo cual nos aleja de afectos pero nos acerca a otras cosas, nos acerca a ciudades, a clubes, a otra gente a otras culturas y eso también es muy lindo. Si uno lo sabe aprovechar el tenis te da una riqueza enorme.
LR: Y en cuanto a la política de la ATP?.
MVA: La atp tiene una política hacia los mercados, esta muy preocupada de acaparar inversiones, de acaparar sponsors, como en todos los deportes se va perdiendo de a poco la esencia para ir acercandolo a lo que requiere el mercado y la televisión. La atp no es distinta a eso, pero es un camino que lamentablemente todos los deportes estan cursando por que todo se esta volviendo muy profesional y muy económico.
LR: Vos decías que te permitis hablar un poco más por que no te corren los millones de grandes marcas como a otros colegas.
MVA: Yo tengo menos cosas que perder, pero no juzgo a los chicos que no manifiestan sus desacuerdos por que sé que tienen otros intereses y muchas veces estan aconsejados para no hacerlo. La verdad no lo veo mal si ellos prefieron no manifestarlo públicamente, es simplemente una elección que no sé si esta bien o mal pero es simplemente así.
LR: Te parece que tu frase del "tenis pobre" marcó una visagra para que el gran público conozca a más tenistas?.
MVA: Creo que la gente empezó a conocer otros tenistas por que empezaron a tener resultados, el tenis pobre va a existir siempre. Como tenis pobre se entiende el tenis chico, el tenis donde uno recien empieza, donde se la lucha, donde hay muchas dificultades y no todo el mundo tiene una fuerza económica para sostener el tiempo que tarda ese proceso. Ahí es donde salen a relucir esas cositas que tanto nos caracterizan a los sudamericanos, de lucharla, de remar y con pocos recursos sacar lo mejor. Creo que hubo todo una camada de tremendos jugadores argentinos que pasaron volando por ese tenis y por una virtud, por que realmente son muy muy buenos y no lo necesitaron. La nuestra necesitó más tiempo para salir de ese nivel, no por una elección propia sino por carencias de nivel, por que no eramos tan buenos como para pasar. Es reconfortante sentir de que hay otro camino, que si uno no es un fenómeno también se puede llegar.